lunes, 31 de enero de 2011

Los Valientes del Estado

Con la fuga del Mayor César Maldonado de la cárcel de Tolemaida y, festejos de Zeus, pareciera que a los políticos que ocupan cargos públicos en el gobierno “del mejor amigo de Chávez”, le hubieran pisado los callos; el ministro del Interior y de justicia balbuceando a los cuatro vientos y echando babas de la furia decidió que todos los militares que estuvieren internos en cárceles del Ejército por delitos comunes u ordinarios y otros, condenados a más de 25 años, fueran recluidos inmediatamente en la cárcel de la picota; de igual manera lo hizo Mindefensa. Que ira les dio por que son militares; si fuesen narcoterroristas estarían celebrando tal como lo hace Piedad, Iván Cepeda, Petro, Gloria Cuartas, el cura Giraldo, coronel Velásquez y otros. Cuando Vargas Lleras fue herido por las FARC acudió inmediatamente a pedir escoltas al Ejército, muerto y pálido de miedo, por no emplear otras palabras, así se convirtió en mejor amigo de los militares; ahora que alcanzó una cúspide donde puede proyectar su futuro político con el ideal de ser presidente de la República se voltea y  expresa con fuerza, furia y sin cobardía contra los oficiales caídos en desgracia por culpa del mismo Estado; por culpa de la política sucia y demagoga; por culpa de los malos gobiernos; por culpa de los comandantes de la Fuerza indolentes y serviles que proyectaron la Institución más gloriosa de Colombia agachando la frente con sumisión y humillación para no perder sus cargos. Hoy estamos empezando porque ya los bravos ministros les dio por lavarse la manos y atacar a los débiles militares que no tienen defensores en su Institución, comandantes, por temor a perder el cargo, a perder su derecho a la indignidad y continuar haciendo venias a estos descarados y cínicos políticos que andan siempre con la frente agachada del peso de sus culpas; por eso Vargas Lleras no mira de frente y no la sostiene porque su corazón y conciencia saben del voltearepas que es, juega con dos ases; se le volteó a Uribe Vélez y ahora aprovecha el momento para golpear a los hombres que lo han defendido, le han dado la libertad para hacer política sucia y alcanzar el puesto que ostenta. Gracias a la Institución que hoy pisotea y juzga sin meditar y consultar la Constitución. ¿Qué se cree este señor Vargas?, será que piensa que tiene esclavos a quien maltrata y fustiga tal como en antaño hicieron los bárbaros españoles como Sámano, Virreyes y Pablo morillo “El pacificador”, chapetones abusivos que empleaban la pena capital y el descuartizamiento. Nosotros tenemos un régimen especial no ganado por políticos sino defendiendo nuestra patria, poniendo el pecho frente a los delincuentes para darle la paz a los compatriotas y ciudadanos colombianos, unos trabajando en el campo y otros en las ciudades ganando el sustento, viviendo a las anchas gracias a estos héroes que le garantizan su libertad. Ustedes desde lo ministerios que tienen el poder en la mano, deben obrar con razón y conciencia siendo justos mejorando la situación de los militares que defienden la democracia dando victorias. Colombia entera los aplaude, admira pero cuando existen casos aislados generalizan acusándolos. El Mayor Maldonado está pagando una condena de un delito que no cometió y que cayó en desgracia por las influencias del simpatizante del Eln, como así lo tildan, Wilson Borja, quien arremetió contra este oficial que se jugó la vida contra los narcoterroristas de las FARC y Eln obteniendo éxitos tales que lo condecoraron con seis medallas de orden público, lo que quiere decir que este militar no es un delincuente, es un héroe de la patria que no ha contado con el apoyo de sus compañeros y, especialmente de su Ejército, para su defensa, sufriendo una sentencia injusta. Esa conducta alocada ha sido consecuencia del desespero y  depresión de la injusticia colombiana que siempre ve con malos ojos a los militares porque está permeada de los dineros de la delincuencia, FARC, Eln y narcotráfico, así está escrito. No podemos permitir que este par de ministros enfurecidos tomen la determinación de borrar del mapa el derecho al fuero que constitucionalmente está establecido para los militares; esto no es de ira, es de ley y ningún cascarrabias tiene potestad para cometer semejante atropello. Es el momento de la integración de las asociaciones y unidades simbólicas de la reserva en pleno para manifestar nuestro inconformismo del nepotismo, arrogancia y soberbia desatado por los citados, que gracias al soporte de los héroes están gloriosos y orondos ocupando tan altos cargos. 

My Lancero, José Hermes Páramo Millán.

No hay comentarios:

Publicar un comentario